Dias 106, 107, 108, 109, 110, 111

Dia 106: 5 de Mayo del 2012

Mucho tiempo pasamos con Damián (mi hermano de la vida) en el año sin vernos porque es un navegante de aguas adentro, pero cuando sus pies tocan tierra sabemos que en algún momento tenemos que vernos como fue esta noche, donde también tuve el placer de presentarle a Gisela.

Risas, comida gourmet y anécdotas

Día 107: 6 de Mayo del 2012.

Quienes creen que los héroes solo existen en las películas y comics, están algo equivocados, porque en las calles los hay, pero son silenciosos, anónimas, personas desinteresadas que dedican parte de su tiempo a ayudar a quien lo necesite, de noble corazón y con ganas de aportar un pequeño grano de arena al mundo.

Día 108: 7 de Mayo del 2012.

Hace mucho tiempo que no sacabas fotos por los barrios de mi buenos aires, hasta hoy que me quedaron unos espacios en mi trabajo y pude hacerlo.

Día 109: 8 de Mayo del 2012.

Así como un 19 de Julio del 2007  se fue el Negro Fontanarosa, hoy se fue otro grande del humor grafico de esta tierra. Caloi que quienes saben aunque sea una partícula de su vida fue el creador de Clemente “quería hacer un bicho sin identidad en la escala zoológica y el salió eso” y de Caloi en su tinta “difundió cortometrajes de animación e historias de artistas de otro país, teníamos la idea de

Mostrar material valioso que la gente no conocía”.

Este programa me lleva a la me moranza con mi abuelo paterno ( dibujante) por que las pocas tardes de sábado que pase con él, mirábamos ese programa y por otro lado la edad con la que nos despide Caloi me recuerda a mi abuelo materno ya que se fue a la misma edad. 63 años, eran jóvenes para irse.

Citas tomadas de la revista Veintitres.

Día 110: 9 de Mayo del 2012.

Siempre que me queda un espacio entre cliente y cliente estoy cerca, paso a almorzar por lo de mi nonna aprovechando verla un rato, como hoy que me espero con un rico guiso de calamares, por que como siempre dije “ porque lo hace con amor”.

Día 111: 10 de Mayo del 2012.

A las 4.10am el cielo se caía a pedazos en mil y una gotas, mi madre que por una razón que desconozco se despertó y me dijo que me llevaba hasta la estación.

Gracias por qué sino no hubiera sobrevivido a la tempestad que se desato afuera y frente a esto sigo valorizando la frase “madre hay una sola”.