CUBA DIA 4: 7 DE MARZO DEL 2012

Como ayer Silvio Rodríguez me despertó a las 6.00am, me prepare y me fui a desayunar, lo estaba haciendo, cuando a casi terminar llego Charlie que por menos que un taxi me llevo hasta morro LA CABAÑA, que quedaba cruzando la bahía, el lunes entero me que pensando que se cruzaba mediante una embarcación, pero estaba equivocado, así que túnel bajo nivel de la localidad caseros fuiste muy querido en mi niñez, pero ahora en mi adultez el túnel subfluvial de La Habana.

Eran las 8am cuando Charlie me dejo, habiendo coordinado que me buscara a las 18pm en el Capitolio, como el castillo de los tres reyes magos abría a las 9am, volví a la explanada a hacer tiempo, cuando paso un buque de carga y me domino la nostalgia por mi amigo Damián (ya que siendo marino mercante permanece mucho tiempo lejos)

Cuando se hizo la hora volví, también estaba la joven que me había dicho que estaba cerrado, estaba parado ahí, me acerco una señorita del lugar y me dijo que ya se podía entrar, le avise a esta joven para que no se quedara esperando y al darnos cuenta por el tono de voz que veníamos del mismo lugar, se nos dio por hacer el recorrido juntos, fuimos hablando de nuestras vidas, de por que habíamos llegado a Cuba y de esta forma hicimos todo el recorrido.





El fortín la cabaña fue nuestro segundo destino y hablando también lo recorrimos, pero antes de cruzar al otro lado, nos faltaba ver algo mas, así que caminando y preguntando por que no sabíamos la ubicación exacta, llegamos a la casa donde vivió el Che dura el tiempo que fue jefe de la cabaña.





En realidad no vivía allí, pero como se quedaba trabajando hasta horas muy tardías, se quedaba a dormir, allí también vivian Aleida March quien fue su esposa y madre de sus cuatro hijos y toda la columna de soldados que trabajaba con el, quienes dormían en las habitaciones donde ahora esta el museo.



Volvimos a La Habana Vieja en guagua (colectivo) cosa que fue la primera vez para mi, aquí no hay maquina y se le da el dinero al chofer, sino que se deposita en una especie de alcancía.
Almorzamos, intercambiamos datos y llegando a la intersección de la calle Obispo y Mercaderas nos separamos.

Saque algunas fotos como el memorial a los estudiantes de medicina, camine por el tramo que me faltaba del paseo del prado, me fui a la plaza del cristo, me senté en una pastelería de estilo francés a descansar y la ultima hora que me quedaba previo a que me viniera a buscar Charlie camine por una peatonal.

Ya con Charlie fuimos a la heladería Copellia, cosa que de camino me saque la duda de por que los niños llevan un pañuelo rojo o azul en su cuello, es un sistema para los chicos de primaria, donde los de azul indica que están en los primeros años y los de rojo en los últimos dos.

Algo que recordé de la charla matutina con Charlie, es que aun existe la caballerosidad, donde no solo le dan el asiento a una mujer embarazada o un anciano, sino a cualquier mujer.

Ya en la heladería Copellia Charlie me dice que hay solo helado de guayaba y coco, a lo que le respondo que no había problema, sentados y degustando el rico helado, le pregunto por el sistema que emplean.

Que es algo así como en la mañana temprano van despachando los mejores sabores (chocolate, frutilla, vainilla) y en el transcurso del día van sacando el resto, como estos que son muy ricos y el valor de la ensalada que comí (ración de cinco bochas) es de 5 pesos cubanos ósea aproximadamente unos 20 centavos de C.U.C esto se debe a que esta orientado a los niños, estudiantes y la clase baja.

Llegue a la casa, me bañe y me fui a cenar para volver temprano preparar la mochila para en la mañana emprender camino al interior.

                             
                                                      Ivan ( Abriendo Caminos)